—Ha sido como si estuviese en un submarino —les cuenta Pablo al salir de la sala de resonancias. Una vez realizadas todas las pruebas, la doctora explica a los padres que Pablo tiene cáncer y les expone los diferentes tratamientos que recibirá para curarse. Ahora el niño deberá ingresar unos días en el hospital para completar los estudios clínicos y empezar el tratamiento.